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LA MONTAÑA MAGICA. Cinco posters. 25 ejemplares Gastos de envio no incluidos.
Risografia en papel reciclado impresa en blanco y negro a doble cara
27-38 cm

LA MONTAÑA MÁGICA

El proyecto se articula a través de las capas del paso del tiempo y de los restos de la memoria de la montaña del Turo de la Rovira.

Llevo años practicando Qi gong en esta montaña un lugar que me conecta y acompaña dentro del mar de cemento de la ciudad.

La montaña del Turo de la Rovira es una de las más antiguas de Barcelona. En ella están los restos de los estratos de la historia de la ciudad. Contiene a su vez la historia a través de su naturaleza y restos de los asentamientos que la ocupan y ocuparon.

“El tiempo, en realidad, no tiene cortes, no hay trueno, ni tempestad, ni sonidos de trompas al principio de un nuevo mes o de un nuevo año e incluso en el alma de un nuevo ciclo; únicamente los hombres disparan cañonazos y echan al vuelo las campanas” Fragmento de "La montaña mágica", Thomas Mann.

Fotos e historia basado en la investigación que he hecho sobre el Turo de la Rovira.

Cada poster es una imagen de algún elemento del parque. Una imagen macro que en su envés nos da perspectiva de lo que fué. Como una excavación arqueológica al observar con el microscopio un fragmento de algo, la montaña nos cuenta en sus restos lo que ocurrió en ella.

La primera pieza es la corteza de un arbol cuya perspectiva es un bosque.

La segunda pieza es una roca que esconde la montaña.

La tercera pieza es las raíces y las copas de unos pinos.

La cuarta pieza es un camino en la montaña y la vista de la ciudad de Barcelona desde los búnkers.

La quinta pieza son unas baldosas y los restos de las barracas con la vista de la ciudad.

Hay cinco fichas que cuentan a través de sus estratos la historia de este lugar por él pasaron iberos, romanos... lugar estratégico en la guerra civil y asentamiento migratorio después de la postguerra.

Obra formada por cinco piezas impresas en Risografia a doble cara. Edición de 25 ejemplares


Fichas:

El nombre de Turó de la Rovira proviene del antiguo bosque de robles. Forma parte de la sierra del Tibidabo que cierra el llano de Barcelona dentro del parque de los Tres Cerros.
Formado por un núcleo de calizas paleozoicas (hace 250 millones de años) coronadas por una densa capa de pizarras silúricas. En la parte alta se usaron para excavar los silos de enterramiento de un poblado ibero.
(1º estrato)

Había una muralla que circundaba toda la cima del monte. El poblado ibero tenia acceso por dos caminos. En el centro una torre circular y al lado la necrópolis.
Los portales de la muralla eran cerrados con puertas de maderas. No quedan restos de ninguna vivienda. Se encontraron restos cerámicas hechos en torno y sin decoración, algunas piezas de telar. Objetos de huesos tipo punzones y agujas.
En los silos de la necrópolis la mayoría profanados había ánforas, urnas ibéricas, restos de animales y cenizas. En total había cuarenta y cuatro silos.
El poblado funcionó entre los siglos III y II a.C.
Enlazaba con otros poblados como el de Montjuich.
(2º estrato)


Existen vestigios de habitantes durante el periodo neolítico de la Edad de Bronce y de la época ibérica en diversas colinas: el Turo de la Peira, la montaña de Montjuic, el Turo del Guinardo y el del Putget.
Durante un tiempo conviven la antigua Barkino ibérica y la moderna Barcino Romana.
La ciudad Romana fue fundada en el año 15 a.c en época del emperador Augusto con el nombre de Colonia Iulia Augusta Faventia Paterna Barcino, con una 10 hectáreas de superficie.
(3º estrato)

En 1937 en plena guerra civil se instala una batería antiaérea en la cima del Turo de la Rovira para proteger la ciudad de Barcelona de los bombardeos de la aviación fascista. Había en total cuatro cañones; las plataformas de tiro; los polvorines; los dormitorios y las salas de los soldados y oficiales.
Al terminar la guerra fueron reutilizados para edificar el nuevo barrio de barracas.
(4º estrato)

En el siglo XIX se construyen varios depósitos de agua que abastecen a la ciudad. La creciente inmigración de la posguerra conllevo la creación de grandes poblados de barracas en toda Barcelona. En el Turo había 110 barracas con arquitectura tradicional de Andalucía que poseían agua gracias a la conexión con los depósitos. El nombre del barrio era el de los cañones por el origen militar de la zona. En 1990 se erradicó el barranquismo. Se destruyeron las barracas aunque aun se pueden ver restos por toda la montaña de las construcciones.
(5º estrato)